Luna llegó a nuestras vidas hace casi 10 años, llegó cuando era cachorra, tenía apenas 1 mes, era tan pequeñita, que cabía en la mano.
Recuerdo que iba pasando una señora con dos gatitos y nos dijo que quería un hogar amoroso para ella, una amiga en común con la señora, estaba con nosotros, así que la adoptamos.
Nunca habíamos tenido una gata o gato, así que estábamos muy pendiente y ocupados, tratando de cuidarla.
Era tan dulce y cariñosa, entonces se ganó a mi papá.
Luna no vino sola, vino con su hermano Pepito, que lamentablemente, en un descuido se escapó de casa y lo atropellaron, entonces por eso Lunita, se convirtió en la súper protegida y consentida de la casa.
La esterilizamos y se puso muy bonita, eso nos encantó, porque estaba tan esponjosa y cariñosa, que de verdad, es muy abrazable jajajaja y ella se deja, eso es lo mejor.
Ya Luna es parte de la familia y por eso la amamos.

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